Autocensura en Venezuela

   Balbi (2014) habló dela autocensura y la censura en Venezuela

Los síntomas de la censura y autocensura en periodistas y trabajadores de medios privados, estatales, comunitarios, e independientes comienzan a sentirse con mayor regularidad en Venezuela. Aunque son diversos matices los que se delinean, ubican en un primer eslabón a la censura como fenómeno social que se expresa mediante órdenes y presiones directas e indirectas. Esta irregularidad, evidentemente, afecta la independencia, la pluralidad, la diversidad y la calidad informativa. (pf. 1)

  Enfoquémonos en la autocensura. Las presiones y medidas coercitivas del gobierno influyen de manera determinante a la labor periodística y al acceso de información pública, esto no discrimina a actores estatales ni a los propios medios de comunicación.

   Estas condiciones son claves para la autocensura. Los periodistas y trabajadores caen ante órdenes e intimidaciones. Se puede decir que en una sociedad democrática el fenómeno de la autocensura puede tomarse como el nivel más avanzado en el que opera la censura, ya que este es un síntoma de que las presiones y excesivos controles por parte del gobierno significan órdenes de silencio para el reportaje de información.

    La inhibición se vuelve costumbre y el periodista va perdiendo su rol de voz de denuncia y ahora se volverá actor que actúa bajo el poder. La autocensura se debe atender, es una dificultad compleja, ya que intervienen presión en el contexto, condiciones en las que se realiza la labor en los medios de comunicación, reivindicaciones laborales, formación en el oficio y construcción del criterio periodístico.

   En Venezuela se perciben todos estos rasgos así podemos evidenciar la decisión de periodistas a callar información por razones de falta de calidad espacio o jerarquía. Se realizó un análisis en lo referente a porque se autocensuraban los periodistas: un 24% es por el interés de proteger una fuente, otro 24% son las situaciones que pueden exponer al medio o al periodista a ser demandado, 19% es por conflictos con la autoridad de gobierno, 17% por conflictos con manifestantes violentos o por actos violentos relacionados con la Seguridad Ciudadana en un 16%.

   Es tanto así que, un 29% de los que realizaron este estudio deciden no publicar una información de interés público ya verificada porque el medio no lo iba a difundir, esto es por los excesivos controles que tiene el gobierno sobre la información y otro 28% dice que no pública para no exponerse amenazas contra la seguridad e integridad personal. Ambos claros ejemplos de que en Venezuela existe la autocensura. 

Balbi, M. (2014). Venezuela: La orden es el silencio, Autocensura. Instituto Prensa y Sociedad. Recuperado de: http://ipys.org.ve/especiales/la-orden-es-el-silencio/